Exploding Kittens trata de apaciguar a todos los gatos que se nos acerquen y estén a punto de estallar. Además, podremos retar a otros jugadores para que vayan quedándose con menos cartas en su mano y ser el último que no fue explosionado por los felinos.
En resumen, se trata de un filler poco complejo, para reuniones distendidas donde el metajuego y las risas tengan más importancia que las mecánicas. Un juego con reglas muy básicas y sencillas con divertidos dibujos. La caja no nos miente: 2 minutos para aprender a jugar y 15 minutos para jugar. ¡Directo al grano!