Este juego incluye pruebas genéricas en las que los jugadores compiten por obtener las cuatro piezas que conforman su cerebro.
Una pieza de cerebro se obtiene descartando dos cartas de prueba del mismo tipo. Por su parte, una carta de prueba se obtiene resolviéndola. A lo largo de la partida, se irán levantando cartas del mazo central. Los participantes compiten por resolverlas antes que el resto, ya que sólo será el que tenga la solución en primer lugar quien se lleve la carta.
Las cartas se dividen en ocho pruebas distintas.
Encontramos retos que pasan por memorizar todas las partes de una carta, adivinar qué elemento es el mayoritario, encontrar la salida de un laberinto o acertar qué término cuenta con el color correcto. Las pruebas estrella son las de coordinación, en las que tocar con el dedo y la mano correcta la parte que se indica y, sobre todo, las táctiles.